#27💡😌 Ciencia, Salud, Naturaleza y Éxito Emprendedor, what else?
Autonomía sí, pero acompañada en la Psicoletter del Emprendimiento #27
¡Hellouu! Soy Sara Enrique, psicóloga, investigadora y docente, y cada quince días te escribo una nueva edición de la Psicoletter: la newsletter de Psicología del Emprendimiento.
¿El propósito? Acompañarte en tu viaje emprendedor para que sea sostenible y que el éxito no sea a costa de tu salud mental.
Pretende ser 🍃 un soplo de aire fresco, cuando no hace frío. ¿Te unes?
Emprender es fascinante. Te permite crear nuevas reglas cuando las que hay no te funcionan, al menos para tu forma de entender el buen vivir.
Joseph A. Schumpeter (1883-1950), es un clásico en las teorías del emprendimiento.
En síntesis, sus obras pasaron de:
A) reconocer un individualismo (para mí, extremo) del emprendedor, como
héroeagente solitario que introduce innovaciones disruptivas en el sistema económico (The Theory of Economic Development, 1934),a B) comprender el emprendimiento como algo más allá del control absoluto de la persona, incrustado en las instituciones, donde incluso un país puede ser emprendedor (Capitalism, Socialism and Democracy, 1942).
De A a B. Pero nadie le quitó la visión economista e historiadora.
Podríamos decir que, para él, el emprendimiento es cuando se introduce una innovación en el sistema económico que, al menos durante un tiempo, hace tambalear la estructura económica preestablecida. Este proceso, al que llamó “destrucción creativa”, según Schumpeter, es la esencia del dinamismo capitalista. ¿Su finalidad? ¿Su para qué? Impulsar el crecimiento económico, renovando el sistema desde dentro.
Aquí, en la psicoletter, con nuestra visión humanista del emprendimiento, que pone a las personas y su bienestar en el centro, le compramos lo de que la persona/institución emprendedora es la que hace tambalear lo preestablecido. Es decir, emprender permite cambiar/replantear alguna de esas reglas del juego preestablecidas, consolidadas, rígidas (las que dan privilegios a unos pocos y marginan a muchos. Sorry not sorry, yo ya llevándolo a nuestro terreno😜).
Al darte, como persona emprendedora, la capacidad de cambiar tu entorno, reconocemos tu agencia = tu capacidad de autonomía, expresada a través de la toma de acción tan característica del emprendimiento.
Pero, no olvides que estamos hablando de autonomía humana, no de autosuficiencia heroica (Torrès & Thurik, 2019). Al ubicarte, como agente emprendedor en tu contexto institucional, tu autonomía es limitada. No es (necesariamente) malo. Significa que la responsabilidad (de tu éxito, de tu salud, de tu emprendimiento) es compartida persona-instituciones, lo que llamamos: responsabilidad ajustada (que ayuda a no sentirse ni víctima ni culpable). Significa que las instituciones también deben tomar parte de responsabilidad para apoyar y promover entornos y sistemas (económicos) sanos, sostenibles.
🏛️ Un ayuntamiento lanza un programa de alquiler accesible para nuevos negocios locales y/o jóvenes emprendedores = te facilita mudarte de nuevo a tu pueblo.
🖥 El gobierno invierte en mejorar plataformas digitales para facilitar y reducir burocracias = menos papeleo y más tiempo para ti.
🚀 Una incubadora apuesta por proyectos que no buscan crecer a toda costa, si no generar impacto social y estructuras sólidas a ritmo saludable = se premia el bienestar desde el minuto uno, ofreciendo herramientas y formación para cuidarse.
¿Qué otros ejemplos te vienen a la cabeza? Me gustaría conocerlos 😊
No todo el peso lo tienes que llevar tú. Reconocerlo te ayuda a aligerarla 🎒. Ni el EMPRENDIMIENTO, ni la SALUD, ni el ÉXITO, pueden abordarse como responsabilidades puramente individuales: requieren apoyo social e institucional.
En esta línea, recuerdo un comentario por parte de una persona de la audiencia tras la charla de la ingeniera y psicóloga Henar Vega en el T3chFest 10, sobre salud mental, burnout y tecnología (por cierto, muy recomendable). El comentario planteaba algo así como:
“¿Quizá hacen falta menos psicólogos y más sindicatos?” (en este caso sindicados de emprendedores🤯). Sindicato, que en griego significa: ‘con’ (unión) + ‘hacer justicia’. Es atrevida, lo sé. Yo te la traigo porque cuanto menos, invita a la reflexión, quizá a la acción.
¡Seguimos! Decíamos que, de Schumpeter, nos quedábamos con la importancia de la autonomía y de la influencia de las instituciones en el éxito emprendedor:
Peeeeeeeero, aquí, psicoletteros (espacio seguro😌), nos vamos a permitir discrepar con Schumpeter y cambiar su para qué. Porque el fin último del emprendimiento, NO tiene por qué ser impulsar el crecimiento económico exponencial, y menos a toda costa.
¿Un PARA QUÉ emprendedor más allá de lo puramente monetario y del crecimiento exponencial🦄?
¡Claro! Sino no, los emprendimientos sostenibles se quedarían fuera del paraguas del emprendimiento (#24): el social, el medioambiental, los 3 tipos de lifestyle entrepreneurs (#23)…
Sus Tus para qué(s), tus propósitos, pueden discrepar del crecimiento exponencial y del ‘ganar más 💰, por ganar más’.
Se pueden centrar más en el cuidado, la sostenibilidad y el éxito a largo plazo.
En definitiva, para qué(s) que se centran en impulsar el valor y el impacto positivo en el bienestar y en la calidad de vida, para cuidar la salud individual, social y del planeta (que para mí, vienen a ser lo mismo, ya conocéis mi corazoncito biocentrista 😬).
Reflexión psicolettera:
¿No es acaso un acto disruptivo en sí mismo quitar del centro al dinerito (por el dinerito) y devolverle el valor al cuidado y la salud? Al reevaluar nuestras prioridades, tambaleamos las bases de la cultura emprendedora hegemónica estilo Silicon Valley… y con ella, del sistema económico dominante 🤑.
Schumpeter nos llamaría: emprendedores de pura raza, ¿no crees?😎
Entonces, si nuestro para qué va más allá de lo puramente monetario:
El éxito emprendedor, también.
Desde esta perspectiva humanista, consideramos que el éxito es tuyo, como persona emprendedora, por tanto, hablamos de un éxito subjetivo (diferenciándolo del éxito del negocio, según KPIs de terceros) y que, este, para ser sostenible, debe ser multidimensional (Wach et al., 2020).
Como se que te gustan los datos, 😉😉 aquí te dejo un modelo predictivo de éxito multidimensional (resultados preliminares de mi tesis doctoral, +800 personas emprendedoras e intraemprendedoras, estimado con Modelos Ecuaciones Estructurales - este apunte pa’ los friquis como yo 🤓 jaj).
A la derecha tenemos las 5 dimensiones del éxito (habíamos dicho que era multidimensional, a esto me refería). En estas 5 patas del éxito, encontramos la parte financiera y del negocio, pero también la parte humana (el bienestar y realización personal + el valor de las buenas relaciones sociales + el impacto social y medioambiental).
Fíjate en los numeritos del lado de las flechitas. Justo estas últimas 3 patas que mencionaba son las que más peso ganaron.
¿La conclusión? Son las que más definen el éxito emprendedor alcanzado. No lo digo yo, lo decís vosotros. 😌El peso de las relaciones sociales laborales, como ves, es alto. Apunte, aquí también están recogidos los solopreneurs sin empleados: evaluaban la calidez de sus relaciones con sus clientes, colaboradores, proveedores… Recuerda, emprendedor como una ‘persona autónoma que convive’.
Borremos al héroe autosuficiente solitario, que es demasiado insano.
Ahora nos vamos a la izquierda del modelo. Aquí tenemos cinco predictores de éxito y su peso relativo. Fíjate dos cositas:
Están prediciendo el 50% del éxito multidimensional, no el 100%. Es decir, no son los únicos 5 predictores de éxito, hay más. Pero estos nos están dando pistas de lo que ya les funciona a los emprendedores que se sienten exitosos:
Salud psicosocial (psicoletter #10), pasar tiempo en contacto con la naturaleza ☺️🌱, buen ajuste persona-entorno laboral (#12) impulsado por el capital social (bye bye heroe solitario) y nuestra famosa lógica efectual (que también hemos trabajado en varias ediciones anteriores, como la psicoletter #17).
Están prediciendo éxito multidimensional en su conjunto. En otras psicoletters iremos desgranando los predictores exclusivos de cada una de las 5 dimensiones de éxito, por separado. Curioso, ¿verdad? Mientras tanto…
¡Nos leemos! 😌
Graciaas,
PD 1: Uno de los predictores de éxito multidimensional es ‘pasar tiempo en contacto con la naturaleza ☺️🌱’, lo desgranaremos también en próximas psicoletters. Por ahora, mírate este artículo de 9 beneficios de la naturaleza para la salud, de Mireia Querol, no tiene desperdicio.
PD 2: Si te perdiste las ediciones pasadas de la Psicoletter, encuéntrarlas AQUÍ.
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