#7💡😌 ¿Miedo al éxito? Creo que te has equivocado, Sara, ¿no era miedo al fracaso? (1/2)
Encrucijada entre el miedo al éxito y el miedo en el fracaso por el Fenómeno del impostor en la Psicoletter del Emprendimiento #7
¡Hellouu! Soy Sara Enrique, psicóloga, investigadora y docente, y cada quince días te escribo una nueva edición de la Psicoletter: la newsletter de Psicología del Emprendimiento.
¿El objetivo? Acercar la ciencia y humanizar el emprendimiento.
Como el emprendimiento es un proceso de aprendizaje en medio del caos 🌪️, hablamos de temas muy curiosos y variopintos alrededor del bienestar -como parte del éxito sostenible- y de esos aprendizajes, ¡eso sí!, abrazando la diversidad de perfiles emprendedores.
Pretende ser 🍃 un soplo de aire fresco, cuando no hace frío.
¿Te unes?
No, no me estoy equivocando, ¿te acuerdas cuando rizamos el rizo en la edición anterior al hablar sobre el conocido síndrome Fenómeno del Impostor (FI)? Estos miedos impostores, que siempre conllevan cierto sufrimiento (porque sino estaríamos hablando de ‘impostores estratégicos’), nos ponen en la encrucijada “miedo al fracaso-miedo al éxito”😵💫. Y te preguntarás:
“Entre el miedo al fracaso y el miedo al éxito, ¿qué sitio me dejas, FI?, qué agobio…, ¡necesito más espacio, por favó!”
Y para poder estar más anchos y conseguir más espacio, seguimos este pícnic conversación gracias al comment de
¡Vamos al lío!
El patrón actitudinal, cognitivo y comportamental del fenómeno del impostor es común y situacional. Es decir, no es ni genético ni aparece en todo momento (menos mal que nos deja tregua para tomar aire😮💨), pero esto no quita que cada quien lo experimente a su manera, en situaciones diferentes, e incluso a distintas intensidades...
Entre lo común del Fenómeno del Impostor está su fuerte componente social
Vimos que su semillita y sus raíces eran contextuales (socioculturales), ¿verdad? Por eso de que aprendemos de fuera pa’ dentro (como la comida del pícnic con Vygotsky). Pues este componente social del FI es el que nos mete en la encrucijada “miedo fracaso-miedo éxito”😅. Y sí, por eso mismo, yo considero que su papel parece muy contradictorio. Vamos a ver a ti qué te parece:
Entre los indicadores del FI, están algunos como estos (los dejo en primera persona, como cuando respondes el cuestionario validado):
Cuando tengo éxito en algo, siento una presión adicional para volver a alcanzar el mismo nivel.
Los elogios me hacen sentir incómodo.
Me resulta difícil aceptar cumplidos o elogios sobre mi inteligencia o mis logros.
A veces pienso que la gente se equivoca cuando me elogia.
Cuando recibo un cumplido por mi trabajo, a menudo me siento incapaz de aceptarlo, o necesito justificar los elogios que recibo.
Pero, ADICIONALMENTE tenemos otros indicadores como estos:
A menudo me preocupa no tener éxito con un proyecto o un examen, aunque otras personas de mi entorno tengan mucha confianza en que lo haré bien. (ves, las otras personas sumando presión jej😅)
A menudo tengo miedo de fracasar en una nueva tarea o proyecto, aunque generalmente me va bien en lo que intento.
No puedo entregar algo hasta que esté perfecto.
¡¿En qué quedamos, FI?!
Por un lado, como síntoma de esa dificultad de interiorizar tus propias experiencias exitosas, un comportamiento común es evitar o rechazar halagos. Porque a pesar de que tú no te creas (no hayas interiorizado) que ese éxito se debe en gran parte a tus propias competencias, a ojos de los demás👀, ese éxito tu éxito, sigue aumentando sus expectativas sobre ti de cara a la próxima.
Uff.. y eso de volver a estar a la altura, ¡que presión! No vayas a defraudarles con tanta confianza que depositan en ti, y claro puedan pensar que estaban equivocados, que no vales tanto, que no eres lo suficientemente competente, uff... 🥲
Por tanto, es ese éxito reconocido socialmente (no interiorizado) el que te va sumando un extra de presión, incomodidad, mayores dudas y miedetes… (deribando en burnout, ansiedad…)
En este sentido, si éxito no está siendo sinónimo de felicidad, de bienestar…, incluso lo está alejando de ti, es lógico que le tengas algo de miedo y rechazo, ¿no te parece?
Además, piénsalo, ¿realmente quieres ser una persona exitosa? En tu contexto sociocultural, ¿qué implica tener más éxito?, ¿qué nos han vendido desde peques que es el éxito?
¿Supone vender más y más, crecer exponencialmente, contratar a más y más empleados?
¿Supone trabajar más?, ¿tener más compromisos y responsabilidades?
¿Supone exponerte más públicamente?
¿Supone sacrificar más tiempo de tus otras prioridades?
Y si además, de ser una persona emprendedora de éxito, también quieres ser una madre/padre de 10, una pareja/amiga de 10, una buena hija/o…,
¿es todo esto compatible?🤯
Volvemos a los roles sociales y a los estereotipos que hemos aprendido desde peques y de fuera pa’ dentro. Estos que nos marcan cómo debemos y cómo no debemos comportarnos -según nuestras características: edad, género…- en diferentes contextos (Eagly y Karau, 2002). Lo que se espera de nosotrxs socialmente, vaya.
Parte del miedo al éxito que sienten las personas con FI se debe al miedo al rechazo debido, por ejemplo, a sobresalir y no cumplir con su rol esperado. Esta parte sigue siendo muy cultural, os suenan algunos “consejitos” como: “haz lo que quieras, pero que no hablen de ti”, “cuidado con los envidiosos”... comparaciones entre compis de cole, entre hermanos, entre amigos, entre madres/padres… con etiquetas del tipo: "el listo", "el responsable", "el talentoso", "el sensible" o "el bueno".
POR EJEMPLO: Cuando decíamos si ser una emprendedora de éxito era compatible con ser una madre 10, estaríamos sumando tanto altas exigencias en el mundo laboral - por la alta competitividad en el mercado, por estar en contextos masculinizados y tener que demostrar que las mujeres también son válidas -, como en el entorno familiar - por defecto, claro😐, esa gran carga de cuidados del hogar y de otros miembros de la familia -. Todo ello, 🤯 posiblemente aumentando el conflicto familia-trabajo y afectando negativamente al bienestar y la calidad de vida.
Y lo mismo aplica para las nuevas masculinidades o géneros no-binarios, que también sufren cuando no encajan! Pero, la idea básicamente es la misma. Ahí la importancia de la presión del contexto sociocultural, y el avance contracorriente por autoconocerse y respetarse (respetar tus prioridades y valores, tus ritmos, tus ilusiones…).
Con taaaantas exigencias que inconscientemente también van de fuera pa’ dentro, (como el resto de aprendizajes) convirtiéndose en autoexigencias, también es lógico que nos de miedo tener éxito, o mejor dicho, a morir de éxito, ¿no crees?
Conclusión de hoy: tenemos que darle un buen repaso y actualización a las definiciones de muchos de estos roles/ideas sociales (mujer, hombre, madre, padre, pareja, familia, amistad, emprendimiento, hogar…) que sin querer hemos ido digiriendo-aprendiendo a lo largo de los años y ahora se encuentran super-entrelazados en nuestra compleja red neuronal de conocimientos, y requiere cierto esfuerzo y responsabilidad (que no culpabilidad!) para quemarlos (esa grasita de más que no sobra porque nos hace sufrir).
Es aquí donde llega la gran pregunta que puede empezar a derrumbar ese ‘miedo al éxito’ y que vemos en la próxima edición (2/2).
Miedo, ¿a qué tipo de éxito?
¡Nos vemos pronto! 😌
Graciaas,
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¡Disfrútalo! 🫶
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Referencia destacada:
Hoang, Q. (2013). The impostor phenomenon: Overcoming internalized barriers and recognizing achievements. The Vermont Connection, 34(1), 6.
Me encantó Sara! Aquí ya encontré algunas pistas que voy a explorar más: El miedo a “morir de éxito” y el perfeccionismo por las etiquetas puestas desde la infancia. Muchas gracias! Ya estaré atenta a la parte 2 🤓