Es fuerte cómo se idealiza la autosuficiencia, cuando en realidad el peso de emprender no se debería llevar en solitario. Abrirse, llorar, pedir ayuda… no son fallos del sistema, son parte de lo que lo hace más habitable.
Así es Ainhoa, como comentas: no son fallos del sistema. Al revés, deberían ser pilares del sistema, un sistema que estamos co-construyendo entre muchos, incluidas nosotras.
En el libro de Patricia Araque, de Emprender con Calma, que recomiendo en esta edición, descubrí el movimiento Zebras Unite Co-Op. Tengo pendiente profundizar más en ello, pero con lo poco que he leído, siento muuy buenas vibras. Te animo a leer también sobre ello, si es que no las conoces ya.
Siiii y para humanizarlo tenemos que poner pensamiento crítico modo on, no dejarnos llevar por la corriente. Conocernos y poner nuestras reglas, eso sí, no desde la autosuficiencia, sino desde la autonomía y la convivencia, contando con esos apoyos sociales tan sanos para todos.
Es fuerte cómo se idealiza la autosuficiencia, cuando en realidad el peso de emprender no se debería llevar en solitario. Abrirse, llorar, pedir ayuda… no son fallos del sistema, son parte de lo que lo hace más habitable.
Así es Ainhoa, como comentas: no son fallos del sistema. Al revés, deberían ser pilares del sistema, un sistema que estamos co-construyendo entre muchos, incluidas nosotras.
En el libro de Patricia Araque, de Emprender con Calma, que recomiendo en esta edición, descubrí el movimiento Zebras Unite Co-Op. Tengo pendiente profundizar más en ello, pero con lo poco que he leído, siento muuy buenas vibras. Te animo a leer también sobre ello, si es que no las conoces ya.
Un abrazo y gracias por pasarte! :)
No conocía el libro. Le echaré un vistazo, gracias!!
Un abrazo!
Si lo lees y en algún momento te aptece unirte a alguno de los encuentros de lectores mensual me dices y me uno contigo de nuevo :)
Genial, gracias!
¡Qué súper necesario humanizar el empredimiento! Gracias Sara😘
Siiii y para humanizarlo tenemos que poner pensamiento crítico modo on, no dejarnos llevar por la corriente. Conocernos y poner nuestras reglas, eso sí, no desde la autosuficiencia, sino desde la autonomía y la convivencia, contando con esos apoyos sociales tan sanos para todos.
Pedazo edición, Sara!! Chapó!
Gracias, siempre, por tu apoyo! :)
Hola, Sara.
La incluimos en el Diario de Substack?
Lo hablamos por privado, Salvador ;)